Que no se os olvide, os quiero.(:

Si, deben ser ellos, ¡Si! ¡Claro que lo son! Son ellos los que me sacan la mayor sonrisa del mundo, los que me levantan si me caigo, los que, si he recibido un golpe están allí para curar las heridas tanto del corazón como las del cuerpo están allí para hacerlas sanar, son ellos los que me animan en esos momentos tristes, los que me aguantan en mis estallidos de felicidad, locura... están ahí tanto si soy borde o como si no, aguantándome hasta ver salir una carcajada de mi boca, los que se hacen fotos guays conmigo, los que saltan por las calles sin importarles que los miren mal, los que tienen conversaciones, secretos, momentos inolvidables, los que me han defendido, los que con un simple gesto ya iluminaban un día gris, los que han estado ahí para aguantarme si me caigo, los que me han gritado en el momento justo pero que han sabido entenderme, los que me han dado la razón en todo momento, los que han tenido risas, lloros, tonterías, mañanas, tardes, noches... Los que han vivido la mayoría de cosas por las que he pasado, los que han estado y estarán ahí por siempre y estoy muy segura de que ellos han venido para quedarse.
Por eso os digo gracias, gracias por estar cerca de mi cuando más lo he necesitado, gracias por estar en los momentos malos y bueno también cuando eran geniales, gracias por ser los amigos más perfectos del mundo.